Luego de 35 años en actividad, Aeromar cerró operaciones este 15 de febrero, agobiada por graves dificultades financieras, que le impidieron cumplir con la exigencia de pagos solicitadas por el gobierno y sus autoridades aéreas, mientras se atizó un conflicto laboral y la colocación de banderas en mostradores de la aerolínea la noche de este jueves.
El ultimo clavo en el ataúd de la empresa fue puesto por Rogelio Jiménez Pons, subsecretario de Comunicaciones y Transportes, quien arremetió contra la empresa cuando dijo que el gobierno no quería más planes sino dinero.
Luego dijo en declaraciones a los medios que es “inminente” la quiebra de Aeromar, tras una agonía de la aerolínea durante al menos cinco años.
Los dueños de la empresa encabezados por el socio principal Zvi Katz, han salido del país desde noviembre, luego de un último intento por salvar a la aerolínea, mediante una condonación de los adeudos fiscales que fue rechazada por el gobierno.
En tanto el director General, Danilo Correa, siguió sin presentarse ante más de 700 empleados de la empresa, a pesar de una inminente advertencia de una huelga avisada desde el fin de semana.
Oportunidad
El anuncio del subsecretario no hizo más que incentivar el conflicto, mientras el resto de las compañías aéreas lo están viendo como una oportunidad de expandir su mercado.
El 15 de febrero al vencer el plazo sobre los adeudos de Aeromar al gobierno, Aeroméxico, Volaris y Viva Aerobus, dijeron solidarse con los pasajeros que habían comprado viajes en la quebrada aerolínea y anunciaron un canje de boletos.
Aeroméxico emitió una política de protección exclusiva para pasajeros que tienen una reservación vigente con Aeromar para los destinos de Colima, Tepic, Ciudad Victoria, Piedras Negras, McAllen e Ixtepec, con vigencia hasta el 28 de febrero de 2023.
En tanto que Viva Aerobus trasladará de forma 100% gratuita a los pasajeros con una reservación con Aeromar entre el 15 y el 22 de febrero, en cualquiera de las seis rutas partiendo del AICM a Acapulco, Ixtapa Zihuatanejo, Cancún, Guadalajara.
Volaris, dijo que trabajará en coordinación con el gobierno para trasladar sin costo, en vuelos domésticos, a los clientes afectados por el cierre de Aeromar.
Brian Rodríguez, analista de Monex, consideró que la situación sólo está abriendo “la oportunidad para Volaris, Vivaerobus y Aeroméxico a incrementar su participación de mercado, al compartir un target similar al de Aeromar, y con la capacidad suficiente, a nivel de asientos disponibles, para cubrir la demanda en el corto plazo”.
Durante 2022, Aeromar transportó un total de 388,148 pasajeros, equivalente a sólo el 0.55% del total que ocupan el servicio regular nacional e internacional por aerolíneas mexicanas.
“Particularmente, la participación de Aeromar en cada Grupo Aeroportuario representa aproximadamente una cifra inferior al 0.4%, lo cual consideramos que no resulta representativo para cada emisora, por tanto, no esperamos afectaciones al sector”, apuntó.
Las deudas
La aerolínea tiene adeudos consolidados por más de 5 mil millones de pesos (mdp) y desde el año pasado está intervenida su caja de recursos por el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Únicamente en salarios y prestaciones no devengadas a sus empleados, la deuda asciende a más de 120 mdp, a los que se le deben sumar 500 mdp en compromisos con el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), que debieron ser pagados ayer, lo que no se realizó y dio origen a la declaración del subsecretario.
Ante ello, la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA), hizo un llamado a Andrés Manuel López Obrador y a su gobierno a promover acciones para respaldar a los trabajadores de Aeromar.
“Tomando en cuenta la alta especialización técnica de cada uno de ellos, que se integren para el desarrollo y crecimiento de los proyectos aeronáuticos que el gobierno impulsa, como la nueva Mexicana”, dijo el organismo.
Ante el incumplimiento de Aeromar, con el pago de sus deudas y por la crisis en sus operaciones, se hizo realidad el estallamiento a huelga para 20:00 horas este jueves 16 de febrero, en busca de garantizar el pago de 103 millones de pesos en prestaciones.
José Alonso Torres, vocero de ASPA, informó que la aerolínea no ha mostrado interés en solventar los adeudos con los trabajadores, por lo que “debemos hacer lo propio para defendernos”.
La crisis de Aeromar como de otras aerolíneas fue detonada por la decisión del gobierno de López Obrador, de cancelar los subsidios a la turbosina y de servicios aeroportuarios, así como por la crisis financiera y operativa propiciada por los dueños de la aerolínea.
Edna Herrera
