Un ferry de la empresa Xcaret Xailing fue suspendido de sus operaciones, luego de que se registrara un incendio en el cuarto de máquinas durante la ruta Cozumel–Playa del Carmen.
El incidente ocurrió el pasado 26 de agosto, alrededor de las 7:00 horas, cuando el barco transportaba a 65 pasajeros. De acuerdo con testigos, sensores internos detectaron humo en el área de pasajeros, lo que activó de inmediato las alarmas. Aunque no se reportaron heridos, la situación generó momentos de nerviosismo entre los viajeros.
A su llegada al muelle de Playa del Carmen, la Capitanía de Puerto —dependiente de la Unidad de Capitanías de Puerto y Asuntos Marítimos (Unicapam)— ordenó que la embarcación quedara atracada en solitario para permitir una inspección federal. En un inicio se suspendieron únicamente las rutas de las 9 y 11 de la mañana, pero horas más tarde se informó que el barco quedaría fuera de servicio el resto del día.
En la terminal se desplegó personal de la Secretaría de Marina, autoridades portuarias y representantes de Xcaret Xailing, quienes supervisaron el arribo de la embarcación. Debido al protocolo de seguridad, las otras navieras que operan en la ruta tuvieron que desembarcar a sus pasajeros en un costado distinto del muelle.
Este episodio revive la discusión sobre la seguridad y el mantenimiento de las embarcaciones en Quintana Roo. De acuerdo con testimonios informaron a Info-Transportes, el barco de Xcaret habría acumulado más de 6 mil horas de operación sin recibir mantenimiento preventivo.
El incendio de 2018
Se trata, además, del segundo incidente similar ocurrido en los muelles concesionados a Jesús Vega Arriaga, lo que ha generado cuestionamientos en torno a la supervisión de la infraestructura portuaria.
El antecedente más grave en la región se remonta a febrero de 2018, cuando una explosión en un ferry de la naviera Barcos del Caribe, vinculada al exgobernador Roberto Borge Angulo, dejó al menos 18 personas heridas en el muelle de Playa Fundadores. Tras aquel siniestro, la empresa enfrentó fuertes críticas y finalmente fue retirada del mercado, con sus barcos enviados a desmantelamiento.
En el caso de Xcaret Xailing, la Capitanía de Puerto será la encargada de determinar si la embarcación puede reincorporarse a la ruta o si deberá permanecer fuera de servicio hasta garantizar condiciones de operación seguras para los pasajeros. Por ahora, la suspensión representa un golpe para la empresa en un sector de alta competencia.
Por Liliana Gómez / Síguenos en Facebook, X y LinkedIn
