En un mercado saturado por neumáticos asiáticos de bajo costo, Bridgestone lanzó el modelo M760 Ecopia, como una jugada audaz para reconquistar al transporte de carga mexicano.
Este nuevo modelo, fabricado en los EE.UU. y presentado en la Ciudad de México, busca algo más que posicionarse: pretende desafiar el paradigma actual de precio sobre calidad, proponiendo una alternativa tecnológicamente avanzada, durable y sostenible frente al 80% del mercado nacional que hoy acaparan las marcas chinas.
Durante la presentación oficial en México, Orlando González, gerente senior de categoría comercial para Bridgestone Latinoamérica Norte, explicó que el M760 Ecopia es fabricado en los EE.UU. y es transportado a México vía terrestre por Nuevo Laredo.
Innovar para resistir
El M760 Ecopia no solo se presenta como un producto, sino como parte de una visión de largo plazo.
Incorporando las tecnologías NanoPro-Tech™ e IntelliShape™, este neumático está diseñado para reducir la resistencia al rodamiento, mejorar el consumo de combustible y mantener la durabilidad incluso en los trayectos más exigentes del país.
Con una carcasa que puede renovarse hasta tres veces y alcanzar más de 800,000 km de vida útil, Bridgestone ofrece una solución de ciclo completo, no desechable.
Retar al modelo desechable
Lo que Bridgestone propone es un cambio de mentalidad: dejar de ver la llanta como un gasto frecuente y pasar a considerarla una inversión de largo alcance.
Mientras muchas llantas asiáticas carecen de capacidad de renovado, el M760 se inscribe en una lógica de sostenibilidad y eficiencia operativa.
Su banda evita la retención de piedras, los bloques múltiples mejoran la tracción y su diseño está hecho para resistir las rutas más duras del país, como las de Veracruz o Sinaloa.
Más que llanta: datos
La innovación no termina en el caucho, porque Bridgestone incorporó en el modelo sensores de presión, temperatura y telemetría a través de Webfleet, su subsidiaria tecnológica.
Además, con el modelo M765 para trayectos regionales, la compañía amplía su apuesta, enfocándose en el servicio de transporte como un sistema inteligente y eficiente, donde el neumático deja de ser una pieza pasiva y se convierte en un actor clave en la toma de decisiones logísticas.
Bridgestone prevé que el 35% de su crecimiento en 2025 provendrá del segmento de camiones tipo cabover, el cual mantiene una constante renovación de flota, a pesar de la caída general del 10% en la industria llantera.
Sostenibilidad con tracción
Con la mira puesta en 2050, Bridgestone no solo compite por cuota de mercado, busca redefinirlo, bajo visión de neutralidad cero emisiones.
Su apuesta por materiales renovables como el guayule y procesos de reciclaje como la pirólisis deja claro que su visión no es solo comercial, sino estructural.
En tiempos donde la eficiencia y la responsabilidad ambiental no son opcionales, Bridgestone está optando por liderar en lugar de adaptarse.
Y lo hace, literalmente, con tracción.
Por Daniel Zurita / Síguenos en Facebook, X y LinkedIn